sábado, 28 de enero de 2012

aborto

He vuelto a comprobar de primera mano, lo muy madre que es la Iglesia. No se acobarda. Como Cristo nos enseñó. No salir correr cuando vemos al lobo, sino salir en defensa de las ovejas y palos contra el lobo. El aborto mata. Mata a un niño. Mata a una madre. Mata a la pareja. Mata el alma de la madre, y le priva de ilusión, de alegría y paz. Por el contrario, el aborto (y con él todos los que a él abocan) aísla hasta la muerte, humilla, avergüenza, ensucia... y encadena con la ley del "no decir", "no sepan", "qué dirán"... Cómo puede existir 1,5 millones de abortos en España y se habla tan poco, no se sabe quién, ni se habla con naturalidad (pretendida por los pro-muerte) Los médicos le dijeron a esta persona, después del aborto, cuando no podía vivir en paz: ¿eres creyente?...pues confiésate. Ya se te pasará. La sociedad, así, en abstracto, es cruel. No entiende de las personas, sino de lo que conviene, de lo correcto, de lo que se lleva... Maldita hipocresía...Bendita vida, bendita verdad, bendito Dios que nos la enseña y nos la custodia...

1 comentario:

  1. Ahora nos han prometido modificar la ley del aborto. Algo es algo, pero no suficiente. El aborto es un asesinato y las clínicas en las que los practican unos campos de exterminio, ylos médicos que por dinero los practican....Por menos (en cuanto a número de víctimas) fueron juzgados muchos en Neuwremberg

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