martes, 26 de octubre de 2010

Fe falsa (II)

Un señor conocido dijo escribió lo siguiente:

"A menudo pienso de que hay que pasar por diversas tentaciones para obtener la victoria definitiva. Sin duda no soy lo que se llama un beato, ciertamente no lo soy. Pero en el fondo de mi mismo hay un hombre religioso, es decir, que cualquiera que combata valientemente en esta tierra, conforme a unas leyes naturales que fueron creadas por un Dios, aquél que nunca capitule, sino que se reponga sin cesar y siga siempre adelante, ese, creo que no será abandonado por el creador de esas leyes, sino que finalmente obtendrá la bendición de la Providencia."

¿Qué os parece este comentario? Si quieres leelo, otra vez, despacio...

Creo que se puede decir que es un buen itinerario espiritual, un conocimiento adecuado de nuestra situación de viadores, es decir, que tendremos derrotas y, por tanto, hemos de luchar...mucho, pero al final obtendremos ¡¡la bendición del aProvidencia!! Pues quiero deciros que estas sentencias fueron pronunciadas por... Adolf Hitler

Creyó que sus ideas eran ciertas y verdaderas, incluso se atrevió a referirse a un ser trascendente!! Y, sin embargo, qué equivocadísimo estaba (y todos sus seguidores). Nunca se planteó la naturaleza de su fe, sino que la siguió ciegamente...y fracasó estrepitosamente...y se llevó por delante la vida de millones de gentes.

¿Cuáles son por tanto las notas de una fe auténtica? ...lo veremos!

1 comentario:

  1. Disculpe mi ignorancia pero no entiendo absolutamente nada ¿que quiere decir?¿a donde quiere llegar?

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