Hoy me han vuelto a parar en la calle, por la tirilla. Es verdad que no es esencial, ni mucho menos, pero cada vez estoy más seguro de que hace bien a la gente... incluso cuando te insultan (que son las menos veces, pero las hay) Cuando blasfeman me acuerdo de las palabras de Simeon que dijo: "E
ste está puesto para que...de que queden al descubierto las intenciones de muchos corazones."
Y cuando es para bien, pues sin más, me alegro de que sirva para alegrarse a un cristiano, sea quien sea.
Se habla tanto de los signos!!! Y este (junto con el hábito) me parece que hablan por sí solos. Una monja joven, un religioso, un sacerdote... vestidos como la Iglesia manda, son un escándalo para esta sociedad tibia. Les ayuda a tomar parte en la cuestión de Dios.
Menuda banalidad!!!!
ResponderEliminarMe refiero a la sociedad.
EliminarMe ha gustado mucho cuando dices "sirva para alegrarse a un cristiano" He conocido el caso de un amigo que me contó como una vez necesitaba confesión, y que gracias a ver a un sacerdote reconocible por la calle lo hizo.
ResponderEliminarY una anécdota de un amigo sacerdote: Unas chicas empezaron a burlarse diciendóle " padre confiéseme " y él con su humor, les contestó : "no hijas, si no hace falta.., ser tontas no es pecado"
Conozco varios casos en los que han pedido oraciones cuando han visto a un sacerdote, o religiosos por la calle.
Yo personalmente, siempre rezo por el que encuentro.
Un abrazo