La noticia es acerca de un politico protestante canadiense que no solo hizo ademan de comulgar, sino que no queda claro... mas bien todo lo contrario, de que comulgara la Santisma Hostia.
Basta de tratar las cosas de la Iglesia como baratijas, basta de usar los sacramentos de forma partidista y torticera, basta ya!
Con esta desagradable noticia quiero reivindicar el derecho de la Iglesia a dar la comunion a aquellos que ella misma decida, y que, dicho sea de paso, no lo hace de modo arbitrario, sino del modo mas evangelico: lease la ultima cena, y la parabola de los invitados a la cena que no tenian vestidos adecuados
Hemos de ayudar a los sacerdotes a que cumplan la mision de ser ministros de la Sagrada Eucaristia, a que la distribuyan con el decoro debido, y a los que deban, exclusivamente.
Desagraviemos:
Os rogamos, dulce Jesús, por los que no ruegan, os bendecimos por los que os maldicen y os adoramos por los que, despiadados, os ultrajan, y con toda la energía de nuestras almas deseamos bendeciros y alabaros e todos los instantes de esta noche y en todos los Sagrarios de la tierra y con los valiosos afectos de vuestro amante Corazón.
Suba, Señor, hasta Vos el doloroso grito de expiación y arrepentimiento que el pesar arranca de nuestros contritos corazones.
Por nuestros pecados, por los de nuestros padres, hermanos y amigos, por los del mundo entero: Perdón, Señor, perdón.
Por las infidelidades y sacrilegios, por los odios y rencores: Perdón, Señor, perdón.
Por las blasfemias, por la profanación de los días santos: Perdón, Señor, perdón.
Por las impurezas y escándalos: Perdón, Señor, perdón.
Por los hurtos e injusticias, por las debilidades y respetos humanos: Perdón, Señor, perdón.
Por la desobediencia a la Santa Iglesia por la violación del ayuno: Perdón, Señor, perdón.
Por los crímenes de los esposos, por la negligencia de los padres, por las faltas de los hijos: Perdón, Señor, perdón.
Por las persecuciones levantadas contra el Romano Pontífice, los Obispos, Sacerdotes, religiosos y sagradas vírgenes: Perdón, Señor, perdón.
Por los insultos hechos a vuestras imágenes, por la profanación de los templos, el abuso de los Sacramentos y los ultrajes al augusto Tabernáculo: Perdón, Señor, perdón.
Por los crímenes de la prensa impía y blasfema, por las horrendas maquinaciones de tenebrosas sectas: Perdón, Señor, perdón.
Por los justos que vacilan, por los pecadores que resisten a la gracia y por todos los que sufren: Perdón, Señor, perdón.
Perdón, Señor, y piedad para los más necesitados de vuestra gracia; que la luz de vuestros ojos divinos ojos no se parte jamás de nosotros; encadenad a la puerta del Tabernáculo nuestros inconstantes corazones; hacedles allí sentir los incendios del amor divino, y a vista de las propias ingratitudes y rebeldías, que se deshagan de pena, que vivan muriendo de amor.
Amén.
Ritual de la Adoración Nocturna Española. Madrid
Oh Espíritu Santo, enséñanos a ir al Sagrario y desagraviar a Jesús de tantísimos pecados como se comenten: irreverencias, profanaciones y sacrilegios contra la Eucaristía.
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